Casi medio año después de la presentación de Soriano Motori en Madrid, charlamos con Marco Antonio Soriano IV, CEO de la marca, para conocer un poco más a fondo los ambiciosos planes de la compañía, que van más allá de fabricar y comercializar motos eléctricas. Porque Soriano Motori pretende «desarrollar un movimiento global a través de un estilo de vida único». Una frase que queda muy bien como claim publicitario o en un dossier de prensa, pero Marco Antonio Soriano va muy en serio.
Recordemos que entre los objetivos principales de Soriano Motori se encuentra el lanzamiento al mercado y la comercialización de tres innovadoras motocicletas eléctricas de altas prestaciones, la Giaguaro V1 Gara, la V1 S y la V1 R, con potencias entre 60 kW (80 CV) y 75 kW (100 CV) y precios desde 32.500 euros a 37.500 euros, según el configurador de la marca. Pero en breve también añadirán a su portfolio bicicletas eléctricas. Además, ya se ha puesto en marcha Soriano Fashion, un vertical de moda con piezas de alta gama que están inspiradas en el mundo del motor y del arte. Y la compañía, que sigue apostando fuerte por el Metaverso cuando otros están en retirada, ya trabaja para crear todo un «mundo Soriano», incluyendo un club exclusivo y otros muchos planes que Marco Antonio Soriano nos detalla en esta entrevista.
P.- ¿Qué ha pasado en estos meses desde la presentación en Madrid, cómo está el proyecto y cuáles son los planes más inmediatos?
R.- Acabamos de terminar el plan de industrialización para los próximos 15 años. Estamos en conversaciones con grupos financieros muy potentes, fondos privados en países como Arabia Saudita, EE.UU. y también en Europa. El plan es seguir escalando y duplicar la producción cada año. Nuestra sede está en Monza, y la segunda base se pondrá en marcha en Dubái o en Abu Dabi. En cuanto a las bicicletas, el grupo que está detrás es Serial 1, que tienen colaboración directa con Harley Davidson. La fábrica en EE.UU. tiene una capacidad de producción de 140.000 unidades anuales. Tenemos previsto empezar con tres modelos y una serie de 5.000 unidades aquí durante el primer cuatrimestre de 2024. No es una joint-venture, pero podría llegar a serlo. También puedo anunciarte que estamos a punto de cerrar una colaboración con la diseñadora marbellí de joyas sostenibles Luz Rodriguez, de Luz de Nehca, para seguir dotando de contenido a nuestra división de moda, que ya cuenta con dos colecciones.
P.- Motos y bicis eléctricas, moda, un club exclusivo… ¿A qué desafíos se enfrenta Soriano Motori para poner en valor todo este universo, sobre todo tratándose de una marca nueva?
R.- En el caso de la moda, por ejemplo, el mayor desafío son los precios. Los distribuidores buscan precios económicos pero quieren lo mejor. Y sobre todo con las subidas que experimentaron no solo las materias primas, sino absolutamente todo tras el covid, ese compromiso de alta calidad y precio contenido es muy difícil. Nosotros lo afrontamos explicando al distribuidor final que somos mucho más que una marca de moda, y que tienen otros elementos alrededor que pueden apoyar las estrategias de ventas. En cuanto al club, en el grupo Soriano somos inversores en hoteles de lujo. Vamos a crear espacios exclusivos en los que los miembros del club, los «Sorianistas», puedan disfrutar de experiencias a medida y tener acceso al ecosistema de la marca Soriano. Ya tenemos en Nueva York y en Miami, y el próximo año quiero abrir uno en Madrid; de hecho, ya le tengo echado el ojo a un par de edificios… También queremos invertir en crear una infraestructura de recarga Soriano personalizada para nuestras motos eléctricas, que pondríamos a disposición de otros clientes.
P.- Siguen apostando por el metaverso… ¿Están convencidos?
R.- Apostamos por la tecnología como herramienta para crecer: robótica, impresión en 3D, metaverso. Estamos en disposición de que un usuario pueda navegar virtualmente en el mundo Soriano y ver nuestros productos, los prototipos que pensamos construir, nuestra forma de trabajar… Estamos en este canal porque hay que pensar en el usuario del futuro. Y para los concesionarios es un instrumento fantástico adicional para las ventas. Los consumidores actuales son súper inteligentes, se informan y utilizan todas las herramientas a su alcance para ello.
P.- ¿Cómo va la serie limitada que anunciaron de 50 motocicletas exclusivas?
R.- Las 50 motos están vendidas, y las primeras 20 ya en fase de pre-producción con el objetivo de entregarlas a los clientes en diciembre. Sus futuros propietarios ya nos han visitado y han podido venir a Monza a ver cómo se construye su moto.
P.- Háblame un poco de las motos, cómo es su concepto técnico y qué las distingue de otras motocicletas eléctricas en este segmento, qué componentes son vuestros y quién fabrica los motores o las baterías.
R.- Yo soy motero de toda la vida. Pero las propuestas de motos eléctricas que había hasta ahora no me llamaban la atención. Por eso pensé en hacer algo diferente, en desarrollar una moto que cumpliera con las demandas de toda la vida de los usuarios de motos deportivas: potencia, prestaciones, agilidad… y, por supuesto, autonomía, que es algo que preocupa especialmente a los que se plantean un vehículo eléctrico. Empezamos desarrollando el chasis, para encajar nuestro sistema modular Soriano, que incluye el BMS, un doble motor y una transmisión de cinco marchas. Los motores actualmente los fabrica Sangalli, y las celdas de las baterías son de un fabricante chino, nosotros nos encargamos del circuito y el cableado. Apostamos por una configuración con dos motores para asegurar la potencia y las prestaciones, y la transmisión permite ofrecer esa sensación de conducción equivalente a las motos con motor de combustión. Yo ya las he conducido y las he llevado al límite en circuito, y puedo asegurar que la experiencia es increíble. Los clientes también podrán elegir entre tres sonidos distintos, desde el más clásico al más futurista. Trabajamos ahora para ajustar la entrega de potencia y la autonomía. Calculamos unos 200 km reales en conducción deportiva, y 250 km en utilización mixta.
P.- ¿Y si una marca quisiera acceder a vuestra tecnología, sería posible?
R.- Tenemos estudio de diseño y ofrecemos servicios de ingeniería. En cuanto a nuestro sistema modular Soriano, si Ducati, BMW o cualquier otra marca quisieran disponer de él… todo sería hablarlo. Pero todavía no se ha dado el caso.
P.- ¿Le preocupa el desembarco de marchas chinas en nuestro mercado? ¿Cómo se puede competir con ellas?
R.- Es una competencia muy difícil, pero nosotros tenemos algo que no pueden aportar las marcas chinas: creamos un producto nacional, con la herencia de lo que fue la marca Soriano, y con el orgullo que conlleva el producto español. Mi objetivo es fomentar la imagen de Soriano como marca, que llegue a ser para los aficionados españoles algo así como lo que supone Ferrari para los italianos, aunque no sean propietarios de uno de sus vehículos. Evidentemente, no competiremos con fabricantes chinos por precio, no manejamos esos volúmenes. Los políticos deben ayudarnos a alcanzar ese equilibrio para que las marcas nacionales históricas como Soriano, que formaron parte del tejido industrial del país, no desaparezcan.
P.- En todo este universo Soriano, tratándose de motos deportivas, es extraño que no hayamos hablado de competición. ¿Encaja en los planes de la marca?
R.- Absolutamente. Pero es un modelo de negocio completamente diferente, todo a su tiempo. La motos Soriano ya participaron en competición en carreras organizadas por el RMCE en el Retiro en los años 30. Una fórmula puede ser buscar acuerdos de colaboración para tener circuitos en España, en Italia… De momento, lo que tenemos en la agenda es cerrar un acuerdo con Moto Trainer, el mejor simulador de conducción para motociclistas que quieren entrenar con su moto en todos los circuitos del mundo, que podría estar listo para finales de año; su CEO es el expiloto Andrea Lombardi. Y tenemos a Marco Melandri como embajador, que nos ayudará a lanzar verticales para enseñar a la gente a pilotar una moto en circuito.